Por María Luisa Estrada de Vélez
y Juan Francisco Vélez
Un sábado en la mañana Carlos nota que su hijo Sergio está totalmente enajenado en su iPad con audífonos puestos. Se le hace raro y se acerca cautelosamente para ver qué está haciendo. Sergio se asusta. Inmediatamente cierra el iPad y pone cara de “no pasa nada”. Pero Carlos toma el iPad en sus manos, lo abre y siente que su mundo se derrumba. Su corazón se parte en dos.
-“Jamás hubiera imaginado que mi hijo de 9 años -considerado por todos como un niño obediente, buen hijo, buen amigo, buen deportista- pudiera estar viendo pornografía dura, como la que encontré en el historial. No sabía qué decir, no sabía cómo reaccionar, no sabía si castigarlo o dejar las cosas así. Lo único que se me ocurrió decir con voz entrecortada fue: “¡Hijo, esto no es el amor!”.
Nueve de cada diez adultos piensan que deberían hablar de sexualidad con sus hijos , pero no saben qué decir, ni cómo, ni cuándo empezar[1]. Piensan que sus hijos son muy infantiles todavía. – “Mi niña aún juega con muñecas”, – “mi niño solo piensa en el fútbol”. “¿Qué inquietudes puede tener sobre sexo?” comentan. – “Prefiero esperar a que me pregunte, que esté más crecidito/a para hablarle del tema”.
Los niños tienen una inclinación natural a investigar. Les interesa aprender acerca de todo lo que les rodea, incluyendo el sexo que también les genera curiosidad. Si nadie les da respuestas, harán lo que todos hacemos cuando tenemos alguna duda, preguntarle a Google. ¿Te imaginas a tu hijo consultándole a Alexa o a Siri?, – ¿qué es sexo?, – ¿de dónde vienen los bebés…?
Los altavoces inteligentes permiten interactuar mediante la voz con un dispositivo inalámbrico asistido por una inteligencia artificial, una forma más natural de navegar y acceder a los contenidos y servicios de la red.
Las voces amables y cercanas están transformando las relaciones de los usuarios con la informática al sustituir el ratón, el teclado y la pantalla que da lugar a una interacción de tipo conversacional que es la que, de manera natural, guía la comunicación interpersonal.
¿Hablar de sexo, ¡yo!?
¿Hablar de sexo, yo? No, no soy capaz………..
¿Por qué no va personalmente y se lo explica a mis hijos?
Me gustaría grabarle, lo ha dicho tan bien
Yo no estudié para hablar de esto, yo soy ingeniera
¿Y si mi hijo va y le cuenta a sus amigos lo que le hablé?
¿Suenan familiares estas frases? Las hemos escuchado al terminar conferencias o talleres de Protege tu corazón en decenas de colegios de diferentes ciudades y países. Existe mucho nerviosismo de hablar y mientras tanto los niños crecen y su curiosidad también.
“La ingenuidad que los niños pierden, la ganan sus padres”.
Los niños aprenden sobre sexualidad no solamente cuando les respondemos preguntas o les hacemos comentarios sobre hechos o eventos que ocurren. “Aprenden a través de un proceso de observación y asimilación mucho más indirecto. A medida que realizan sus actividades diarias, todo el tiempo y con todos sus sentidos, extraen continuamente datos físicos, sociales, emocionales de hechos de su entorno, que poco a poco dan forma a cómo llegan a ver y entender su mundo”[2].
A los 2 años los niños ya juegan con los celulares de sus papás. Rápidamente se vuelven usuarios de YouTube, su plataforma favorita para ver videos. Por si no lo sabías, YouTube ha estado en la Dirty Dozen Listdel 2018, lista que publica cada año el Centro Nacional contra la explotación sexual (National Center on Sexual Exploitation) desde el año 2013 para dar a conocer a las principales marcas o instituciones que perpetúan la explotación sexual, sea a través de la pornografía, la prostitución, la objetivación sexual, la violencia sexual o el tráfico sexual. Ha tomado tanta fuerza que nadie quisiera estar en esa lista porque es un motivo de vergüenza nacional en Estados Unidos. “A fines de 2017, YouTube fue objeto de escrutinio por albergar videos perturbadores dirigidos a niños, a menudo con personajes infantiles en situaciones de carga sexual o violentas, muchos de los cuales se monetizaron. YouTube anunció haber eliminado 2 millones de videos y cerrado más de 50,000 canales que ofrecían este tipo de contenido”.
Mucha gente supone que hay un grupo gigantesco de personas detrás de YouTube Kids filtrando videos, pero no es así. Los niños se pueden encontrar desde videos de gatitos lindos a videos con contenido sexual explícito.
¿Quién de los dos debe iniciar las conversaciones?
Idealmente los papás deberían hablar con sus hijos varones y las mamás con las niñas. Pero puede pasar que alguno de los dos no se sienta cómodo y es aconsejable que ambos se sienten juntos para iniciar una conversación y complementarse. Cuando la información se refiera puntualmente a la menstruación en las niñas o a los sueños húmedos en los niños, cada uno puede hablar desde su propia vivencia para ampliar los detalles que hagan falta.
Es más frecuente que las mamás les expliquen a las hijas los cambios de la pubertad y la llegada de la primera menstruación. En cambio, a los niños no se les suele explicar tan en detalle, el sentido que tienen y su relación con la primera eyaculación, etc. Y qué falta hace que el papá se siente con su hijo y le explique lo grandioso de su cuerpo masculino, cómo se prepara en la pubertad para la llegada de la fertilidad, que lo posibilita para transmitir la vida en un futuro. Qué diferente sería la visión de la sexualidad y de su cuerpo en un niño que ha recibido estas explicaciones de su papá.
Con motivo del Día del padre en junio pasado, Culture Reframed lanzó un corto animado con el título “¡Parent Up! and Talk to Kids About Porn”. El video se refiere a la forma en que muchos jóvenes – especialmente los niños (pero también cada vez más las niñas) – aprenden sobre sexo, las relaciones y cómo tratar a las mujeres a través de la pornografía, en lugar de aprenderlo de sus padres.
Es un claro llamado para que inicien conversaciones con sus hijos varones.
Ver el video aquí
Todo vacío tiende a llenarse
Las respuestas incompletas o la ausencia de ellas aumenta la curiosidad natural hacia el sexo. “Pero un niño de 5, 6 o 7 años no necesita saber nada de sexualidad!”, comentan muchos padres de familia. Como dijimos antes, las respuestas que los padres no dan, las buscarán por su cuenta…o les llegarán de fuentes poco recomendables.
Por ejemplo, Pornhub, el portal más grande de videos para adultos con 70 millones de visitantes diarios, ofrece educación sexual: anatomía, salud reproductiva, ETS, etc. Dice Culture Reframed que la “pornografía está ampliamente disponible de forma gratuita en línea, a través de Snapchat e Instagram, o haciendo clic en el sitio de pornografía más grande de Internet, Pornhub. La pornografía es la principal forma de educación sexual para millones de niños. ¿Y qué están aprendiendo los niños? Que la violencia, la degradación y la humillación son fundamentales para las relaciones y el sexo”.
Netflix lanzó la serie Sex Education en febrero de 2019. Plantea la masturbación, la orientación sexual, las relaciones sexuales, el sexo oral y el sexo anal en forma explícita mezclado con el consumo de drogas y el abuso de alcohol. Desde luego esta no es la forma que tu elegirías para que tu hijo conozca del tema sexual.
Según Maialen Garmendia, directora de KidsOnline en España, en entrevista realizada por empantallados.com, losniños tienden a esconder sus experiencias de riesgo en la red, porque temen que sus padres restrinjan el uso del celular o el acceso a Internet. Según un estudio de Kids Online, a los 9 -10 años de edad, el 36 % ya han visto imágenes sexuales. Para muchos adolescentes la pornografía es la única fuente de aprendizaje sobre sexualidad, algo totalmente sesgado y peligroso. Más que a una edad concreta, es recomendable adaptarse a cada hijo y hablar con ellos sobre estos temas, según van creciendo.
Muchos padres tienen temor de que sus hijos encuentren pornografía porque han escuchado que es cada vez más frecuente y accesible. Sin embargo, piensan que sus hijos son “tan buenos” que nunca se verán atrapados por algo así. Fue lo que le sucedió a Carlos con su hijo Sergio. Nunca imaginó que fuera a buscar la pornografía. Pero Sergio tenía curiosidad de saber más acerca del sexo y las mujeres. Y alentado por unos amigos que le pasaron direcciones de páginas porno, la encontró en su propia casa.
Hay demasiados estímulos dentro y fuera del hogar y la única manera de prevenir que tengan una incompleta o confusa información es iniciar conversaciones.
Desde que están pequeños es muy importante alentar a los hijos para que te consideren como la fuente más importante de información en todo lo que quieran aprender. ¡No dejes que Google sea su maestro!
Papá, mamá es hora de hablar. Más vale llegar un año antes, que un minuto después.
Que tus hijos sepan que te pueden preguntar todo como se lo preguntan a Google.
¡Sé el Google de tus hijos!
[1]Connected Parents, The key to protecting teens, Medical Institute, Austin, TX
[2]Deborah M. Roffman, But how’d I get in there in the first place?Da Capo Press, Cambridge, MA, 2002, p. 6
*marialuisa.estrada@protegetucorazon.com
*juanfrancisco.velez@protegetucorazon.com