En Hermosillo tanto la gente, como su clima nos han tratado espléndidamente. En abril, tuvimos aire fresco mañana y noche y temperatura de 23 grados. Para una tierra donde estas llegan a 45 grados, es bastante agradable.Se nos hace agua la boca recordando la deliciosa carne sonorense, las tortillas sobaqueras y las coyotas de Doña María. Que tierra y que comida tan especiales!!

Desde que el Centro Escolar Campogrande optó por PTC, entendió la aplicación del mismo, como un programa continuo, progresivo y a largo plazo. Ya vamos para el tercer año, siguiendo una secuencia de temas para cada grupo de acuerdo con la edad de los alumnos y sin repetir los ya vistos el año anterior.

Los papás también van entendiendo, que los talleres también son diferentes y acuden con ilusión. No es raro que en algunas ocasiones, los padres, cuando reciben la invitación al taller de PTC piensen: “ya fui el año pasado…” Esto es un mal entendido, porque la primera vez que se inicia en un colegio se da un taller de presentación y luego hay más de 17 talleres con temas variados para padres y continuamente se diseñan otros nuevos.

La continuidad se aprecia muy bien, en el caso de los niños de sexto de primaria quienes empezaron el programa cuando estaban en 4º, o sea dos años atrás, y tienen bien claras las cinco dimensiones de la persona, el valor de la fertilidad y el aprecio por la vida humana. Con los alumnos de segundo de secundaria se aplicó un tema nuevo llamado Puro Corazón.

Una sesión que les maravilló a los de 5º de primaria fue “Yo antes de nacer”. Todos encantados de imaginar cómo fue su vida dentro del vientre materno y de ver que los bebés antes de nacer se acurrucan, bostezan, se chupan el dedo, hacen volteretas, se estiran, sonríen, parpadean y estornudan. Poder ver y palpar los fetos de diferentes tamaños fue una sensación para ellos.

Otro aspecto fundamental de PTC que se ha cumplido en el Campogrande, es el acompañamiento de los padres. Los alumnos de sexto recibieron el tema Sorpresa, te espera un gran regalo en compañía de sus papás. Además para los papás de secundaria y preparatoria, se programó un taller sobre cómo hablar con los adolescentes. Al comienzo se hizo una exposición de por qué y cómo se les debe llegar a los hijos en esta edad y luego analizaron casos prácticos, con risas y mucho entusiasmo porque se veían en aprietos para responder a ciertas preguntas o manejar situaciones típicas con los hijos. Fue gracioso que al terminar un padre de familia se acerca y dice: “mejor dame tu celular y cuando tenga que hablar con mi hijo te marco y así no se me complica”… Pero muchos se comprometieron con la idea de hablar más con sus hijos, de estar más conectados.

Los papás de primaria, asistieron a otro taller: Cuándo, cómo y qué hablar de sexualidad con los hijos, con una duración de dos horas. La respuesta en este también fue muy positiva.